La Economía es un tema que siempre está presente en nuestras vidas, ya sea de forma directa o indirecta. Desde las decisiones financieras que tomamos en nuestro día a día hasta los grandes movimientos que afectan a nivel global, la Economía juega un papel fundamental en el funcionamiento de la sociedad. Sin embargo, a menudo se tiende a enfocar en los aspectos negativos de la misma, como crisis económicas o desigualdades sociales. Por eso, en este artículo queremos destacar algunas experiencias positivas en el mundo de la Economía, inspiradoras y motivadoras, que nos demuestran que es posible lograr un impacto positivo en este ámbito.
Una de estas experiencias es la de Yves-Alain Portmann, un joven emprendedor suizo que ha logrado combinar su pasión por la tecnología y la sostenibilidad en un proyecto con un impacto social y económico muy positivo. A los 16 años, Portmann creó una empresa llamada «Blue Systems», que se dedica a recolectar y reciclar dispositivos electrónicos en desuso. Su idea surgió al darse cuenta de la cantidad de basura electrónica que generamos a diario y de la falta de un sistema eficiente para su reciclaje. Hoy en día, Blue Systems cuenta con más de 100 empleados y ha evitado que miles de toneladas de desechos electrónicos terminen en vertederos, generando además un beneficio económico.
Otro ejemplo inspirador viene de la mano de la empresa danesa «Too Good To Go». Esta iniciativa nace con el objetivo de reducir el desperdicio de alimentos y, al mismo tiempo, ayudar a restaurantes y comercios a aumentar sus ingresos. Funciona mediante una aplicación en la que los usuarios pueden comprar «cajas sorpresa» con alimentos en buen estado que los establecimientos no han podido vender y que de otra manera terminarían en la basura. De esta forma, se promueve el consumo responsable y se apoya a los negocios locales. Esta idea ha tenido tanto éxito que actualmente opera en varios países europeos y ha salvado miles de comidas del desperdicio.
Pero no solo las empresas pueden tener un impacto positivo en la Economía, también hay iniciativas a nivel gubernamental que merece la pena destacar. Un ejemplo de esto es la estrategia de Economía circular implementada en la ciudad de Ámsterdam, en Países Bajos. Esta ciudad se ha propuesto reducir a cero la cantidad de residuos enviados a vertederos para el año 2050, y para lograrlo ha puesto en marcha medidas como la promoción del reciclaje, el fomento de la reutilización y la implementación de tecnologías sostenibles. Gracias a estas acciones, Ámsterdam se ha convertido en una ciudad más limpia y eficiente, y ha generado nuevos empleos y oportunidades económicas.
Estos son solo algunos ejemplos de cómo la Economía puede ser utilizada como una herramienta para generar un impacto positivo en la sociedad. Existen muchas otras iniciativas y proyectos en todo el mundo que demuestran que es posible unir la rentabilidad económica con la sostenibilidad y la responsabilidad social. Además, estas experiencias nos recuerdan que cada uno de nosotros, desde nuestro lugar, podemos contribuir a construir una Economía más justa y sostenible.
En conclusión, la Economía no solo se trata de números y estadísticas, también es una fuerza poderosa que puede ser utilizada para mejorar la calidad de vida de las personas y del planeta. Es importante enfocarnos también en las experiencias positivas y en aquellas personas y organizaciones que están haciendo un esfuerzo por generar un impacto positivo en el mundo. Sigamos inspirándonos en estas historias y trabajando juntos para construir una Economía más equitativa, sostenible y próspera.