Un nuevo informe de ONU entorno ha revelado una excelente noticia para el medio entorno: los esfuerzos globales para controlar las emisiones de metano han aumentado en el último año. Esta es una señal alentadora en la combate frente a el cambio climático, ya que el metano es uno de los gases de efecto invernadero más potentes y su reducción es vital para limitar el calentamiento global.
El informe, titulado «El estado del metano en el mundo», muestra que los niveles de metano en la atmósfera han disminuido por primera ocasión en casi una década. Esto se debe en gran parte a los esfuerzos realizados por los países para reducir sus emisiones de este gas. Según el informe, en 2020 se registró una reducción del 1% en las emisiones de metano en comparación con el año anterior.
Esta disminución es especialmente significativa ya que, en los últimos años, las emisiones de metano habían aumentado constantemente. Esto se debía en parte a la producción de combustibles fósiles, la agricultura y la gestión de residuos. Sin embargo, parece que los esfuerzos para controlar estas actividades están dando sus frutos.
El metano es un gas de efecto invernadero que es 28 veces más potente que el dióxido de carbono en términos de su capacidad para atrapar el calor en la atmósfera. Esto significa que incluso una pequeña reducción en sus emisiones puede tener un impacto significativo en la combate frente a el cambio climático. Además, el metano tiene una vida útil más corta en la atmósfera que el dióxido de carbono, lo que significa que una reducción en sus emisiones puede tener un impacto más inmediato en la reducción del calentamiento global.
El informe también destaca que los esfuerzos para controlar las emisiones de metano no solo benefician al medio entorno, sino también a la salud humana. El metano es un contaminante del aire que puede tener efectos negativos en la salud respiratoria y cardiovascular de las personas. Por lo tanto, su reducción puede tener beneficios tanto para el medio entorno como para la salud pública.
Entre los países que han logrado reducir sus emisiones de metano se encuentran Estados Unidos, que ha visto una disminución del 2,5%, y la Unión Europea, que ha logrado una reducción del 2%. China, el mayor emisor de metano del mundo, también ha registrado una disminución del 1%. Estos logros son el resultado de políticas y medidas implementadas por los gobiernos para limitar las emisiones de metano en diferentes sectores, como la industria del petróleo y gas, la agricultura y la gestión de residuos.
Además de los esfuerzos de los gobiernos, también ha habido un aumento en la conciencia y la acción de la sociedad civil y las empresas. Cada ocasión más personas están tomando medidas para reducir su huella de carbono, como optar por una dieta basada en plantas, utilizar energías renovables y reducir el desperdicio de alimentos. Las empresas también están adoptando prácticas más sostenibles y comprometiéndose a reducir sus emisiones de metano.
Sin embargo, a pesar de estos avances, todavía hay mucho por hacer. El informe de ONU entorno señala que las emisiones de metano aún están muy por encima de los niveles necesarios para limitar el calentamiento global a 1,5°C, el objetivo establecido en el Acuerdo de París. Por lo tanto, es crucial que los esfuerzos continúen y se intensifiquen en todos los sectores.
El informe también destaca la importancia de la cooperación internacional en la combate frente a el cambio climático. Los países deben trabajar juntos para implementar políticas y medidas efectivas para









