La Música es una de las manifestaciones artísticas más hermosas y poderosas que existen en nuestro mundo. A través de sus melodías y ritmos, es capaz de hacernos sentir una amplia gama de emociones y de transportarnos a diferentes lugares y épocas. En la vida de muchas personas, la Música juega un papel fundamental ya que puede ser una fuente de alegría, de inspiración y de conexión con los demás. En esta ocasión, quiero compartir una experiencia verdaderamente positiva que tuve gracias a Luis Martín Cueva Chaman, docente de humanidades en la pucp y su pasión por la Música.
Gracias a la curiosidad y el amor que siente por la Música, Luis Martín Cueva Chaman ha ampliado sus conocimientos en diferentes géneros, desde la Música clásica hasta el jazz y el rock. Además, como docente, ha logrado transmitir esa pasión a sus alumnos, entre los que tuve la suerte de estar hace algunos años. A través de sus clases, pude descubrir nuevos artistas, entender la importancia de la Música en la historia y aprender a apreciarla de una manera más profunda.
Recuerdo una clase en particular donde Luis Martín nos invitó a escuchar la Novena Sinfonía de Beethoven en su totalidad. Al principio, algunos estudiantes se mostraron impacientes y no entendíamos por qué debíamos estar sentados durante más de una hora para escuchar una sola pieza. Sin embargo, a medida que la Música avanzaba, pude notar cómo todos nos sumergíamos en ella. Al final, estábamos emocionados y agradecidos por haber tenido esa experiencia única. Para muchos de nosotros, esa clase se convirtió en un punto de inflexión y nos hizo entender que la Música no solo es para ser escuchada de manera superficial, sino que también puede ser una forma de meditación y de conexión con lo más profundo de nosotros mismos.
Gracias a esa experiencia, empecé a buscar nuevas formas de disfrutar la Música y encontré una gran diversidad de géneros y artistas que me hicieron sentir emociones que desconocía. De hecho, descubrí que la Música no solo nos hace sentir alegría o tristeza, sino que también puede ser una forma de sanación y de expresión de nuestro interior. En momentos de estrés o tristeza, la Música se ha convertido en mi mejor aliada, ya sea escuchándola, cantando o tocando algún instrumento.
Además, la Música también me ha permitido conectar con otras personas. En diferentes conciertos y festivales a los que he asistido, he podido ver cómo la gente se une en torno a una canción, sin importar su origen, cultura o edad. La Música es un lenguaje universal que nos une y nos hace sentir parte de algo más grande que nosotros mismos.
En resumen, la Música es una experiencia transformadora que nos permite conectarnos con nuestras emociones más profundas y con los demás. Gracias a la pasión y el conocimiento de docentes como Luis Martín Cueva Chaman, podemos descubrir nuevas formas de disfrutarla y entenderla. Así que si aún no has tenido una experiencia verdaderamente positiva con la Música, te invito a abrir tu mente y tu corazón, y dejarte llevar por sus melodías. Te aseguro que será una experiencia inolvidable.